jueves, 16 de julio de 2020

16/07/2020 (B)

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ANTI RUGGIERO
Paolo Benza @paolobenza:

Más allá de los chongos (mi favorito: el ministro Work & Travel), sí hay cosas que decir sobre Martín Ruggiero. Y no son sobre su edad. Como todos ya saben, el nuevo ministro de Trabajo ha hecho toda su carrera en un solo sitio: el Payet. Un rastro que el área de comunicaciones de la PCM quitó de su presentación en redes sociales (sin una explicación válida, aún) y que el área de imagen del Payet se ha encargado de borrar con mucha eficiencia (casi la misma con la que martirizan periodistas económicos para que los citen con los otros 3 apellidos del bufete). - Desde ayer en la mañana, horas antes de la juramentación, el nombre de Ruggiero había sido borrado de todas las pestañas de la web del Payet indexadas a Google. ¿Por qué este afán, tanto de la empresa como del gobierno, por borrar su origen? Es una pregunta clave, dado que el ministro ya no defiende solo los intereses de los clientes de su ex firma, sino los de todos los trabajadores peruanos, ¿verdad? - Como muchos han notado, es imposible comparar a Ruggiero con María Antonieta Alva. Cuando asumió el MEF, Toni (a quien se prejuzgó injustamente por ser una mujer joven) tenía 10 años de carrera en el sector público, en distintos ministerios. La formación laboral de Ruggiero se limita al edificio Real 3 de San Isidro. ¿Venir de la actividad privada te inhabilita para ser un buen funcionario público? No necesariamente. Pero con Ruggiero sí veo dos grandes riesgos derivados de ello. - Ser laboralista en un gran estudio no es precisamente estar del lado del trabajador. En los estudios ya de por sí está normalizado el abuso laboral... parte IMPORTANTE de la chamba del laboralista corporativo es defender a sus CLIENTES de las demandas de sus trabajadores/sindicatos, y ayudarlos a despedirlos y amonestarlos. Ahora que estamos hablando de estudios de abogados, ¿alguien se atreve a hablar sobre ese régimen de cuarta-quinta sin beneficios laborales (pese a la evidente existencia de subordinación) con el que todos los estudios tienen contratada a su gente? Los abogados defienden clientes como actividad profesional, y eso no necesariamente se refleja en sus intereses políticos. Pero HABRÍA QUE SER INGENUO para creer que ambas cosas nunca se mezclan. Hace dos meses, al flamante ministro de Trabajo le parecía "preocupante" que su cartera no fuera a aceptar las solicitudes de suspensión perfecta presentadas antes de que el gobierno emitiera el DU 038-2020. Y uno puede discutir si eso es correcto o no, PERO AHORA ESA DEJA DE SER LA PREGUNTA. Con Ruggiero, la pregunta pasa a ser: ¿qué clientes del Payet solicitaron la suspensión perfecta antes del DU? E incluso más. Ahora la pregunta es: ¿qué clientes del Payet han registrado, en general, una solicitud de suspensión perfecta? - Porque, seamos claros: un abogado no queda anulado para la función pública por haber tenido clientes privados. PERO si asesoro empresas que presentan pedidos de suspensión perfecta y EN APENAS UNOS DÍAS dirijo el ministerio que va a aprobarlos, CLARAMENTE TENEMOS UN PROBLEMA. Digo. ¿no?

¿Está dispuestos Ruggiero a levantar la confidencialidad de los clientes del Payet que han aplicado a suspensión perfecta o cese colectivo? Probablemente no. Pero tendría que negociar y hacerlo. Si no por ética, por estrategia política: esas cosas siempre se terminan sabiendo y su cargo se volverá insostenible. Lo que lleva al segundo riesgo: perfiles como el de Ruggiero hay por miles. Abogados pitucos de grandes estudios que repiten el mismo evangelio: flexibilización', 'tramitología', 'demasiados costos laborales', 'el Estado no sirve', 'dejen tranquilas a las empresas'. Como hechos en maquila. - Y nunca falla: siempre recomiendan lo mismo. Tomemos de ejemplo a Germán Lora, quien fue socio y dirigió el área laboral del Payet por 16 años, incluidos los 13 que Ruggiero estuvo en ese equipo. Hace 8 meses, Lora partió a otra firma (¿cuántos de sus nuevos clientes han pedido suspensión perfecta que evaluará la cartera del nuevo ministro?). En esta columna para El Comercio, Lora resume sus recomendaciones para salir de la crisis. Las pocas opiniones que ha emitido Ruggiero antes de asumir el cargo indican que su mindset es el mismo que el del socio que dirigió su área durante toda su carrera. De hecho, lo ha ayudado en sus papers desde hace más de una década. ¿Dónde está el problema? Que con Ruggiero se va a volver a poner a prueba, más que nunca y en el peor momento para el país, la cantaleta de dogmas vacíos que repiten los abogados pitucos. Por ejemplo, vamos a volver a poner a prueba si la informalidad es un tema TAN SIMPLE que se resuelve solo 'reduciendo la burocracia', como escribió Ruggiero hace poco en este pobrísimo artículo de Gestión. ¡A nadie se le ocurrió antes! Y lo mismo sobre otros temas. No estoy diciendo que la burocracia no esté relacionada a la informalidad, sino que esa visión monotemática del mundo es demasiado limitada, aún más para los momentos que vivimos. Puede que ese discurso se retroalimente en la práctica corporativa, pero no se sustenta en ningún tipo de conocimiento sobre cómo funciona el Perú más allá del Real 3. Ya este gobierno demostró que su principal falencia fue no adaptar bien medidas como la cuarentena a la realidad nacional (aunque esta tampoco haya sido inútil). ¿Por qué arriesgarnos con un ministro que tiene un concepto tan básico sobre algo como la informalidad? En fin: queda por ver si Ruggiero prueba erradas estas opiniones, o si reafirma el prejuicio de que en su círculo corporativo los puestos se consiguen solo por recomendación del sobrino de quien está a cargo.

NANO

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